18 sept 2011

La Espera.


Todo en esta vida implica esperar, vamos por la vida queriendo sacarle hasta la última gota a los segundos, rompiendo esquemas, tratando de sobrevivir a la espera.
Esperamos para todo... para reír, para llorar, para crecer, para aprender, todo requiere de un tiempo que muchas veces no poseemos.
Esperamos para amar y ser amados y aun así nos falta esperar mucho mas...
Esperamos por un amor valiente que nos rescate cuando muchas veces ese amor esta en la misma esquina donde hemos pasado de prisa sin detenernos, sin darnos cuenta que siempre ha estado ahí. Creo fielmente que todos tenemos el potencial para amar en muchos grados, lo cierto es que no todos se atrevan a realizar esta practica por miedo a ser heridos. Muchas veces se cree todo perdido y el amor nuevamente llega y hace de las suyas, te revuelca, te oxigena, te calma, te eleva, te deja y vuela.
Esa espera casi siempre se vuelve sinónimo de agotamiento, la desesperación se vuelve nuestro cómplice y no hay otra cosa que llorar sin compasión.
Muchos no entienden que esperar es una actividad que requiere coraje, no quiero pasar y darme cuenta que tarde encontré lo que soñé como diría Arjona.
Cuantas lagrimas caben en la espera, cuanto dolor se encapsula en el tiempo, cuantas veces el miedo puede llegar a consumirnos, cuantos suspiros le quedan a esta espera.
Cuanta espera le falta a ese beso tuyo.